La provincia de Girona es un auténtico tesoro para los amantes de la historia, la naturaleza y la buena gastronomía. Aquí te dejamos una lista de «Pueblos a menos de una hora de Girona que no te puedes perder» En sus alrededores encontramos una gran variedad de pueblos con encanto que conservan la esencia del pasado y el ritmo tranquilo de la vida rural catalana. Ya sea que busquemos una escapada de fin de semana o un viaje más prolongado, descubrir los pueblos a menos de una hora de Girona es una experiencia que combina cultura, paisaje y bienestar.
En este recorrido, exploraremos los rincones más emblemáticos del interior y la Costa Brava, te recomendaremos dónde alojarte y te daremos algunos consejos prácticos para aprovechar al máximo tu visita.
Una provincia llena de historia y contrastes
Girona es una joya del noreste de Cataluña, conocida por su casco antiguo medieval, su muralla romana y su vibrante ambiente cultural. Pero más allá de la ciudad, se esconde un mosaico de pueblos que conservan tradiciones centenarias, arquitectura única y una oferta gastronómica que deleita a los paladares más exigentes.
Desde las villas medievales del Empordà hasta los pueblos pesqueros de la Costa Brava, la región ofrece un sinfín de opciones para quienes buscan experiencias auténticas, a poca distancia de la capital provincial.
Pueblos medievales cerca de Girona que enamoran
Besalú – Patrimonio histórico junto al río Fluvià
Uno de los pueblos más emblemáticos de Girona es Besalú, situado a solo 35 minutos en coche de la capital. Este municipio destaca por su espectacular puente románico del siglo XII, una de las imágenes más icónicas de Cataluña.
Al cruzarlo, nos adentramos en un casco antiguo que parece detenido en el tiempo, con calles empedradas, murallas y vestigios judíos, como el Micvé —baño ritual hebreo—, uno de los mejor conservados de Europa.
Además, Besalú cuenta con una excelente oferta de restaurantes donde degustar platos tradicionales como la escudella i carn d’olla o el trinxat de la Cerdanya.
Peratallada – Un viaje a la Edad Media
A 45 minutos de Girona, Peratallada es uno de los pueblos mejor conservados del Baix Empordà. Sus murallas, calles de piedra y pasadizos estrechos conforman un escenario digno de película.
Declarado conjunto histórico-artístico, este pequeño pueblo ofrece un ambiente acogedor con tiendas artesanales, restaurantes de cocina catalana y plazas llenas de encanto. El Castillo de Peratallada y la Plaza de las Voltes son paradas imprescindibles.
Pals – El balcón del Empordà
Pals es otro de los pueblos medievales más bellos de Cataluña. Situado sobre una colina, ofrece vistas panorámicas al mar y al macizo del Montgrí. Su casco antiguo, conocido como El Pedró, está lleno de miradores, galerías de arte y bodegas locales.
La Torre de las Horas, construida en el siglo XI, domina el horizonte y ofrece una de las vistas más emblemáticas del Empordà. A pocos minutos se encuentra la Playa de Pals, perfecta para combinar historia y mar en una misma jornada.
Pueblos costeros con encanto mediterráneo
Calella de Palafrugell – Tradición marinera y paisajes de postal
A solo 50 minutos de Girona, Calella de Palafrugell conserva el encanto de los antiguos pueblos de pescadores. Sus casas blancas, barcas sobre la arena y calas de aguas turquesas conforman una estampa típicamente mediterránea.
El paseo por el Camí de Ronda, que conecta Calella con Llafranc, es ideal para disfrutar del paisaje costero. Además, los Jardines de Cap Roig y su famoso festival de verano son una visita obligada para los amantes de la música y la naturaleza.
Cadaqués – Inspiración artística y belleza natural
Aunque el camino es algo más sinuoso, Cadaqués se encuentra a poco más de una hora de Girona y merece sin duda una visita. Este pueblo blanco del Cap de Creus es conocido por haber sido hogar de Salvador Dalí, cuya casa en Portlligat hoy funciona como museo.
Su ambiente bohemio, sus galerías de arte y sus vistas al Mediterráneo hacen de Cadaqués un destino imperdible para los amantes de la cultura y la tranquilidad.
Naturaleza y autenticidad en el interior de Girona
Rupit i Pruit – Piedra, montaña y tranquilidad
A unos 60 minutos de Girona se encuentra Rupit i Pruit, un conjunto medieval rodeado de montañas y bosques. Su puente colgante es uno de los puntos más fotografiados del pueblo. Además, las rutas de senderismo hacia el Salt de Sallent, la cascada más alta de Cataluña, son ideales para los amantes de la naturaleza.
Santa Pau – En el corazón de la Garrotxa volcánica
Ubicado dentro del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, Santa Pau ofrece una experiencia única entre murallas medievales y paisajes volcánicos. Su casco antiguo es un remanso de paz, con una plaza porticada encantadora y vistas al volcán de Santa Margarida.
Este entorno natural es perfecto para combinar historia, gastronomía y excursiones al aire libre.
Dónde alojarse cerca de Girona
Una escapada por los pueblos de Girona merece un alojamiento que esté a la altura de la experiencia. Si buscamos confort, privacidad y ubicación estratégica, el mejor punto de partida es Caldes de Malavella, una localidad situada entre el interior y la Costa Brava, famosa por sus aguas termales y su tranquilidad.
Villa Ziba – Exclusividad y bienestar en plena naturaleza
Si queremos disfrutar de una estancia única, recomendamos Villa Ziba, una villa privada ubicada en Caldes de Malavella, Girona. Esta propiedad combina diseño contemporáneo, lujo discreto y un entorno natural incomparable.
Villa Ziba está pensada para quienes buscan descanso y bienestar. Cuenta con amplios jardines, piscina privada, gimnasio, zonas de relax y espacios ideales para familias o grupos que deseen desconectar del estrés diario.
Además, su localización estratégica permite explorar fácilmente los pueblos medievales y costeros de la provincia. En menos de una hora se puede llegar a destinos como Besalú, Pals, Calella o Rupit, sin renunciar a la comodidad ni a la exclusividad.
Hospedarse en Villa Ziba no es solo una elección práctica, sino una experiencia de lujo y conexión con la auténtica esencia de la Costa Brava. ¿Cómo llegar?
Gastronomía y cultura local: los sabores de Girona
Además de Pueblos a menos de una hora de Girona que no te puedes perder, La gastronomía es otro de los grandes atractivos de la región. En los pueblos cercanos a Girona encontramos desde restaurantes con estrellas Michelin hasta bodegas familiares y mercados tradicionales.
Los platos típicos, como el suquet de peix, el arroç de muntanya o los embutidos de Olot, son parte esencial de la identidad local. Además, el vino de la D.O. Empordà y los dulces como los xuixos de Girona completan una experiencia gastronómica inolvidable.
Consejos para planificar tu escapada desde Girona
- Alquila un coche para moverte libremente entre los pueblos.
- Evita los fines de semana de verano, cuando algunos destinos están más concurridos.
- Lleva calzado cómodo, ideal para recorrer calles empedradas.
- Planifica una ruta circular, combinando pueblos de interior y costa.
- Reserva tu alojamiento con antelación, especialmente en temporada alta.
Preguntas frecuentes (FAQs)
¿Cuál es el pueblo más bonito cerca de Girona?
Cadaqués y Besalú suelen encabezar la lista de los pueblos más bonitos por su arquitectura y su historia, aunque Peratallada y Pals también son joyas imprescindibles.
¿Cuántos días se necesitan para recorrer los pueblos cerca de Girona?
En tres o cuatro días es posible visitar varios pueblos sin prisa, combinando costa e interior. Si dispones de más tiempo, podrás disfrutar con calma de su gastronomía y paisajes.
¿Dónde alojarse para visitar los pueblos de Girona?
La ubicación ideal es Caldes de Malavella, donde se encuentra Villa Ziba, una villa de lujo perfecta para explorar toda la provincia desde un entorno tranquilo y natural.
Conclusión
Explorar los pueblos a menos de una hora de Girona es descubrir una región donde la historia, la naturaleza y la hospitalidad se entrelazan. No te olvides de visitar los Pueblos a menos de una hora de Girona que no te puedes perder, desde los muros medievales de Besalú hasta las calas transparentes de Calella, cada destino ofrece una experiencia única.
Y si queremos coronar esta escapada con una estancia exclusiva, Villa Ziba se presenta como el alojamiento perfecto: una villa elegante, rodeada de naturaleza y con todas las comodidades para disfrutar de la Costa Brava en su máxima expresión.